Desde pequeña tiene dos pasiones, la moda y el trabajo social, y desde hace cinco años las ha unido. Carlota Gramunt, antigua alumna del Centro Universitario Villanueva, es la dueña y fundadora de Black Velvet Couture, una firma con la que pretende aportar un granito de arena para cambiar el rumbo del sector textil hacia un camino más responsable y sostenible.
Estudió EBS en Villanueva con la intención de aprender a gestionar su empresa de moda, y aprendió a entender el mundo empresarial y cómo funcionar dentro de él. Actualmente realiza prendas por encargo y se mueve a través del boca a boca, aunque ya ha estrenado su página web. Sus clientes son sobre todo público femenino que va de los 25 a los 35 años, con personalidades muy definidas.